martes, 12 de abril de 2011

¿Qué hemos encontrado?

He vuelto a casa después de ver a una amiga y he pensado en el robo de su móvil. Tan sólo es un pequeño aparato electrónico pero le hemos concedido la misión de controlar nuestra vida. Gran parte de nuestra conexión con el mundo depende de los artilugios inteligentes de ese mundo que queremos cambiar. Y eso me cabrea enormemente.

Ahora tendrá semanas de trabajo recuperando esa información importante para su existencia. Compromisos, amigos, asuntos legales, contactos laborales, en fin, que no la envidio en nada. Pero su historia me ha servido para revisar la situación de mi teléfono móvil, que por supuesto, como se me pierda o me lo roben, me da un sincope.

Gracias a esta historia he prestado atención a otros asuntos importantes del día a día. Una, dedicar un poco de tiempo a este nuevo blog. Dos, hacer un par de llamadas telefónicas a esos amigos con los que quedaste en estar en contacto. Tres, organizar la mesa de mi escritorio porque últimamente no encuentro casi nada. Cuatro, buscar una canción inspiradora de esas de toda la vida y con las que te inyectas en vena un poco de energía vital.